sábado, 7 de noviembre de 2015

Valencia, la ciudad de las mil torres


Así la llamaron los viajeros que visitaban Valencia en el siglo XVII, exageraban sin duda, aunque ajustando cifras podríamos hablar de unas trescientas.
Valencia era una ciudad conventual, una gran parte de su superficie estaba ocupada por iglesias y conventos, los campanarios, espadañas, cúpulas, emergían de un skyline de dimensiones más humanas que el actual, confiriéndole un aspecto orientalizado.
Cambiaron los tiempos, la ciudad fue creciendo en anchura y en altura, se vaciaron conventos y desaparecieron al mismo tiempo que las nuevas construcciones competían en altura con los antiguos campanarios y las viejas construcciones religiosas, los miramares quedaron ciegos ante los altos edificios, hoy son otras torres las que dominan el horizonte, haciendo difícil la observación de los viejos gigantes si no es desde su misma base.
Traigo hoy aquí una selección fotográfica de esas vetustas torres, campanarios y cúpulas que parecen querer reclamar su altura y su dignidad entre esas edificaciones que las engullen dejando atisbar, entrever su glorioso pasado.
En este recorrido veremos varias veces algunas torres, entre ellas el Miguelete, buscándolo desde varias perspectivas, en un ejercicio de encontar los huecos desde donde se puede ver ese patrimonio tan a la vista y al mismo tiempo tan escondido.





















































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